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Mi educación

  • Foto del escritor: expuestasoficial
    expuestasoficial
  • 21 ago 2019
  • 2 Min. de lectura

Nací en un poblado de la Ciudad de Puebla, soy la segunda de 4 hermanos y el día de hoy, les voy a contar como el machismo me arrebató la oportunidad de estudiar una carrera universitaria.


Mis padres tenían una relación un tanto tóxica, mi madre se partía el lomo trabajando para alimentarnos a mis hermanos y a mi, mientras mi padre se paseaba con sus amigos de cantina en cantina.

Mi relación con mis papas era un tanto extrema, por una parte tuve un vinculo muy con mi papá, a pesar de ser irresponsable con los gastos de la casa, nos queríamos mucho, me defendía y sobre todo me enseño lo que es el amor incondicional; en cambio la relación con mi mamá era un tanto caótica, hoy en día lo entiendo, mas no lo justifico, se desesperaba de la conducta de su esposo, le estrenaba saber que tenia que cargar con todos los gastos de la familia, es por eso que se desquitaba conmigo, el ser mujer implicó que yo tenia que cocinar, limpiar, cuidar a mis hermanos pequeños, llevarlos a la escuela, ayudarlos con su tarea y encima tenía que buscar tiempo para hacer la mía.


Eramos una familia con nivel socioeconómico muy bajo, pero nunca nos falto nada, gracias a mi mamá y mis abuelos, que en lo que podían nos ayudaban.

Sin embargo mi hermano mayor y yo solo nos llevamos algunos meses, en año escolar el iba un año adelante de mi.

Llegó el momento de la graduación de prepa de mi hermano mayor, mi mamá estaba muy orgullosa de él, de su pequeño, que hasta la fecha sigue siendo el favorito de mi mamá, nunca se molesto en disimularlo, pero bueno, el chiste es que mi mamá solo podía pagar una universidad, y el por ser el mayor y sobre todo por ser hombre, le dieron a esa oportunidad.

Salí de la prepa y no tuve opción, ya no había dinero para apoyarme en mis estudios, para irme a la ciudad a estudiar. Fue en ese momento en donde descubrieron que mi hermano ni siquiera estaba inscrito en la universidad, el no quiso estudiar pero si quiso salir del pueblo como fuera, es de esperarse que entre en desesperación, me enoje mucho, no era justo que mi hermano teniendo la posibilidad de tener una carrera profesional, no lo aprovechara, y yo que me moría de ganas por estudiar, saber más, ser alguien en la vida, ser la primera en la familia con un titulo universitario, se me negará por el simple hecho de ser mujer, que yo no iba a tener tantas oportunidades en el mundo profesional como mi hermano por ser hombre.

Al final estudie para secretaría ejecutiva, encontré trabajo en la Ciudad de Puebla, a los pocos meses conocí a quien iba a ser mi esposo, me casé, tuve hijos y muchos pero muchos años después estudie una carrera, me sentí muy orgullosa por haber logrado lo que siempre quise, y sobre todo porque me gradué con honores y mis hijos pudieron ver y ser testigo de mis logros.


Esta fue mi historia, tiene muchos matices pero no es una historia en donde me di por vencida, espero tu que estas leyendo esto, tampoco te des por vencida en tu propia historia.


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